VAPIANO: UN AUTOSERVICIO DIFERENTE
- Maria Alejandra Castillo Sch
- 22 abr 2017
- 2 Min. de lectura
Una de las mejores cosas de viajar es descubrir qué sorpresas nos tienen en el campo de la comida esos lugares que visitamos. Aunque intento ir siempre a lugares distintos y probar cosas nuevas, existe un restaurante que no me permite hacerlo cada vez que voy a Washington D.C.
Vapiano, un restaurante que como su nombre lo indica, es italiano. También queda claro gracias a la decoración del lugar y por supuesto, a la comida.
Este restaurante sorprende desde el momento en el que entras. Te recibe una señorita con sonrisa amable, te entrega una tarjeta y te explica la dinámica del restaurante. No puedes perder esta tarjeta, ¡por nada del mundo!
Ahí te van a cargar lo que vas consumiendo para que al final cuando ya quedes satisfecho la pases por la caja y sepas cuánto debes pagar. Genial, ¿no?
Tienes tres ambientes para elegir donde comer, a la derecha encuentras unas mesas de madera grandes pero a la vez se ven algo elegantes, a tu izquierda un lugar más relajado, cerca del bar, con mesas mucho más bajas y puffs para sentarse, y al fondo, tienes mesas para comer al aire libre si así lo deseas.
¿Ya sabes dónde? ¡Perfecto! Estas listo para sumergirte dentro de las diferentes posibilidades de la comida italiana en Vapiano, pero no te preocupes, tienes una carta con recetas exquisitas para guiarte y si quieres añadir o quitarle algo, puedes hacerlo. Tú decides desde que tipo de pasta quieres, hasta cuantos gramos de proteína deseas en ella, solo debes dirigirte a la barra de los cocineros.
Un Vapianisti, como le llaman a sus colaboradores, estará feliz de prepararte tu comida mientras habla contigo sobre como quieres exactamente tu plato, ¡todo en cuestión de minutos!
Disfruta, cada bocado es una experiencia. En la mesa encontrarás una pequeña planta de albahaca por si quieres ponerle una hojita a tu plato, también vinagre balsámico y aceite de oliva para que hagas esa mezcla perfecta y la acompañes con el delicioso pan de Vapiano.
Y recuerda… Chi va piano, va sano e va lontano.
(Quien va despacio, llega a salvo y llega lejos).
Alguien que me mire como yo a este plato de pasta.
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